Galería de fotos Alikindoi
Vídeo de la actuación Alikindoi
Alikindoi a esa Manada incipiente que se apunta a eso de la inocencia de lo espontáneo, a lo genuino de la simplicidad, a lo entrañable del atrevimiento, a la pasión de los comienzos, a la hermandad que nace de los que forman un corro. Y, por lo que se ve, no renuncian al trozo del pastel que les corresponde.
Alikindoi a esa Piña que abandonó las alturas de la rama y cayó en tierra. Tierra para el entusiasmo efervescente del descubrimiento, para el carácter flamenco que va haciendo su aparición por los poros con su olor agridulce. Tierra para que los piñones también se desprendan, rueden, se esparzan y fecunden prados, sotos, riberas y espesuras.
Alikindoi a esa Tribu que termina y que comienza. Que quiere homenajear a lxs compañerxs de viaje ausentes y celebrar a las presencias. Que quiere bailar su propia travesía por el placer y el dolor de los flamencos: la partida -que puede ser la curiosidad, pero que se transforma en necesidad-, el vehículo de la confianza… y arribar a la alegría de quienes estamos y de quienes nos acompañáis.
Carlos Sepúlveda